EL OTRO DÍA VISTE COMO PODÍAS DECORAR TU TERRAZA O JARDÍN con unos bonitos farolillos decorados por ti misma con un estilo muy estival.
Hoy tienes aquí la opción de no gastarte un euro y reutilizar todos esos tarros de conservas que sigues acumulando en casa y que ahora los puedes aprovechar durante los meses de verano para decorar desde la terraza y el jardín, hasta el interior de tu hogar.
¿Cómo?... ¡ Muy fácil !. Para ser un farolillo, evidentemente tiene que poder colgarse, y para poder conseguir que tus tarros puedan colgarse, tan solo tienes que seguir 2 pasos.
El primer paso es cortar dos trozos de alambre (no muy fino) para rodear el cuello del tarro. Estos dos trozos de alambre tienen que ser igual de largos. Enróllalos entre sí para conseguir un alambre más fuerte y rodea el cuello del tarro dos veces, haciendo con el mismo alambre en ambos lados, una especie de anilla. Esta parte es la que aguantará todo el peso y tienes que asegurarla bien.
El primer paso es cortar dos trozos de alambre (no muy fino) para rodear el cuello del tarro. Estos dos trozos de alambre tienen que ser igual de largos. Enróllalos entre sí para conseguir un alambre más fuerte y rodea el cuello del tarro dos veces, haciendo con el mismo alambre en ambos lados, una especie de anilla. Esta parte es la que aguantará todo el peso y tienes que asegurarla bien.
El segundo y último paso es cortar de nuevo dos trozos de alambre del largo que desees que cuelgue tu farolillo. Enróllalos entre sí y únelo al alambre que has puesto en el cuello del tarro, también enróllandolo pero en las anillas que hiciste a los lados.
Para terminar tu farolillo, decóralo con arena o tierra y algunas piedrecitas, y en el centro coloca la vela. Ten en cuenta que no tienes que llenarlo hasta arriba de arena porque la luz de la vela tiene que verse en el interior del tarro y no sobresalir por arriba.
Fuentes imágenes: Complety coastal, Pottery Barn.
